En el día de ayer sesionó el Congreso de nuestra Federación, entidad que agrupa a todas las Asociaciones de base de profesionales de la salud en el GCBA. El temario con el cual el mismo fue convocado planteaba el abordaje de la paritaria 2019.

Desde la APSS venimos discutiendo y construyendo un pliego paritario integral desde comienzos del año partiendo de la realidad concreta de que nuestros salarios y condiciones de trabajo vienen en franco retroceso. Ello se ve reflejado en la pérdida de poder adquisitivo teniendo en cuenta los magros acuerdos alcanzados los últimos años, una inflación que diluyó los porcentuales y diferentes avances en materia de reformas del sistema sanitario –reforma de la carrera mediante- que obstaculizan llevar adelante la atención de calidad que la población necesita.

Ya a comienzos del mes de febrero, desde la Comisión Directiva de la APSS se difundió un material (http://apss.org.ar/wp-content/uploads/2019/02/documento-paritarias-2019.pdf) que cristaliza un minucioso detalle del análisis de la evolución salarial de 2018 que fue utilizado como insumo para la construcción colectiva del Pliego Paritario (http://apss.org.ar/pliego-paritario-2019-apss/) consensuado por nuestro cuerpo de delegades a fines del mismo mes a partir de lo discutido en hospitales y centros de salud. Este mismo pliego, coherentemente con las prácticas de democracia sindical que ejerce nuestro gremio, fue el que nuestres congresales llevaron al Congreso del día de ayer.

Desde la conducción de Federación presentaron “propuestas” de “conversaciones informales” mantenidas con el GCBA y la conducción de Médicos Municipales. De estas conversaciones presentaron una vergonzosa propuesta sintetizada de la siguiente manera: un aumento del 4% para cierre del 2018 más una suma fija no remunerativa “del doble de la del 2017”. Esto agregaría “alrededor de un 7%” de aumento “según la categoría” y un bono de $10.000 por única vez. Para 2019 8% en abril, 6% en julio, 5% en septiembre, calculado sobre el sueldo de marzo. Prevé cláusula gatillo en julio automática de compensación por inflación y otra en diciembre, mes en que finaliza la paritaria y debe convocarse otra.

Cabe mencionar que, como ha sucedido ya en varias ocasiones, el Consejo Ejecutivo transmite resultados de conversaciones informales, sin presentar por escrito nada de lo intercambiado. Entendemos que esas conversaciones no pueden traducirse en un documento hasta tanto la negociación no finalice, pero también consideramos que para una mejor comprensión y análisis del debate necesario en relación a un tema tan sensible para el conjunto de les trabajadores no se han arbitrado los medios necesarios para garantizar claridad de la supuesta propuesta sugerida por el gobierno en esas conversaciones.

Les congresales planteamos lo insuficiente de ello detallando que cualquier propuesta por debajo del 15% de recomposición al 2018 y del 50% de aumento remunerativo para el 2019 es insuficiente. También presentamos como parte del pliego las condiciones de trabajo que vienen siendo atacadas por el larretismo en la Ciudad en connivencia con la AMM y las demandas para su rectificación.

Por otra parte, planteamos la imperiosa necesidad de que el llamado “estado de alerta” se transforme en un activo plan de lucha alrededor de diferentes temas urgentes como la reforma del CCT, la reforma sanitaria y la reglamentación de la carrera en el marco de la paritaria. Un estado de alerta sin plan de lucha no existe, las reivindicaciones caen en saco roto. Planteamos que firmar lo que el gobierno quiere imponernos lejos está de ser representativo de las necesidades de les trabajadores que arguyen representar. Aún más en este contexto de ajuste incesante.

Planteamos reservas respecto de la confianza en la aplicación de la cláusula gatillo de parte del gobierno, dados los antecedentes inmediatos, en los cuales no se viene cumpliendo. Y consideramos que con un gobierno que quiere desmantelar la salud pública, no podemos aceptar disciplinadamente sus ofertas”.

No obstante, la moción que fue votada por mayoría es la de Bioquímicxs, que siguiendo la lógica de congresos anteriores, delega la soberanía del Congreso de Delegades al Consejo Ejecutivo: mandatar al CE a negociar de la mejor manera posible la propuesta recibida de parte del GCBA y mantener la mesa sectorial abierta. Esta moción resulta ganadora por 45 votos de los 71 congresales presentes.

 

Avasallamiento de la democracia en el Congreso

Desde el cuerpo de Congresales de la APSS venimos sosteniendo participaciones en Congresos donde cada vez resulta más clara la diferencia de concepción acerca de la democracia sindical. Esto afecta a congresales de varias asociaciones que nos quedamos sin posibilidad de expresar nuestros mandatos y proponer debates.

Es así que reiteradamente debemos confrontarnos con mociones que delegan el poder de decisión al Consejo Ejecutivo sobre cuestiones que la Ley de Asociaciones Sindicales le reserva al Congreso.

También cuando comenzamos a expresar nuestro mandato nos interrumpen y nos dicen que está fuera del «orden del día», desde definiciones muy acotadas de lo que implica un proceso paritario, dejando por fuera las condiciones de trabajo y negando el derecho a la actividad sindical, base de la construcción de poder para que les representantes de les trabajadores puedan efectivamente negociar y no sólo aceptar sin chistar lo que ofrece el empleador. Esto, además, impide directamente la posibilidad de debate y discusión en un tema tan importante como la paritaria.

En el modo de coordinar el Congreso también se expresa con virulencia. El presidente del Congreso hace un manejo bastante irregular de las mociones, decretando la imposibilidad de mocionar cuando el contenido se aparta de su objetivo de lograr transitar un Congreso que le delegue las decisiones al Consejo Ejecutivo. Estos manejos también resultan un ejercicio de la violencia hacia quienes queremos realizar otras propuestas, al no dejar siquiera que sean consideradas.

Estas acciones, así como los intentos de limitar el tiempo de las intervenciones, las «mociones de orden» para no permitir mociones que se consideran fuera del orden del día y los abucheos (sí, abucheos) provienen de otres delegades congresales (algunes son integrantes de la Comisión Directiva de otras asociaciones), lo cual además de indignarnos por la agresión que implica, nos preocupa porque hace al panorama de posibilidades de alianzas para la construcción de resistencia a las reformas sanitarias que están atacando a la salud pública.

En este congreso, con esos manejos, se nos impidió mocionar las dos terceras partes de nuestro pliego paritario: las que tienen demandas sobre condiciones laborales y las que tienen propuestas de plan de lucha.

La paritaria es la instancia para defender nuestras reivindicaciones salariales y condiciones laborales. Repudiamos estas maniobras que anularon la posibilidad de nuestro gremio de llevar a votación la expresión de la defensa de dichas condiciones en algunos puntos tan relevantes como el rechazo al 5×1, el rechazo a la reforma del convenio colectivo, el rechazo a la CUS, el rechazo a la unificación de los hospitales de Salud Mental y la demanda de equiparación de los salarios de residentes y trabajadores de planta.

Ante este escenario absolutamente lamentable para el conjunto de les trabajadores nos preguntamos en qué instancia consideran asociaciones como la de psicólogxs que hay que discutir el incendio de establecimientos, el cierre de hospitales o el control biométrico de les trabajadores. Nos dijeron que estábamos en Disneylandia por pretender el debate. Les mismes que plantean que no habrá pérdida del poder adquisitivo en 2019 con la paritaria que propondrían el macrismo y el larretismo.

Es preocupante no sólo el clima de falta de respeto en el que hemos llevado adelante la representación de nuestres afiliades, sino que peor aún, se ha celebrado con aplausos el impedir que se pueda ejercer la democracia sindical. Los congresos deben ser las instancias en las que los debates deben ser dados, las ideas expresadas y los mandatos respetados. También deben ser las instancias en las que se mandate al Consejo Ejecutivo para que ejerza su función por la defensa indeclinable de les trabajadores que representa.

Hoy lamentamos un Congreso en el que no se ha dado lugar a la expresión de opiniones, donde se festeja acallar a quienes no piensan igual. Hoy se ha votado que el Consejo Ejecutivo avance con sus negociaciones informales con el Gobierno de la Ciudad y la AMM, sin un horizonte definido, sin reivindicaciones claras para con les trabajadores.

 

Llamamos a todes nuestres afiliades a continuar profundizando la reflexión, discusión y organización colectivas que a su vez apueste a mayores niveles de democracia sindical.

Agradecemos la confianza invocada para llevar su voz a estas instancias e invitamos a llenar nuestra próxima asamblea extraordinaria a realizarse el próximo 10/4 en la sede de nuestra APSS. Porque como venimos sosteniendo NO HAY ESTADO DE ALERTA SIN PLAN DE LUCHA!

 

CUERPO DE CONGRESALES DE LA ASOCIACIÓN DE

PROFESIONALES DE SERVICIO SOCIAL DEL GCBA